LÓPEZ, NANDO
Tras la huida de T., el bando Rebelde se llena de recelos. Y por si fuera poco, Némesis estrecha el cerco sobre Ítaca. Solo Ariadna sigue creyendo en T., aferrándose a los sueños que los unen. Mientras los Rebeldes planean el asalto al Taigeto, el corazón del Nuevo Orden, otras dos personas toman el mismo rumbo: un Cazador con una presa muy codiciada y alguien dispuesto a destapar los secretos más oscuros de Ypsilon.